Cuando hablamos de la seguridad y rendimiento de las calderas de gas, es fundamental realizar revisiones periódicas. Estas no solo garantizan el buen funcionamiento del equipo, sino que también brindan tranquilidad y evitan posibles incidentes. Pero, ¿con qué frecuencia debemos realizar estas revisiones? En este artículo, exploraremos la importancia de las revisiones de la caldera de gas, cuándo deben realizarse y quién debe encargarse de hacerlas.
La importancia de las revisiones periódicas
Una caldera de gas es una pieza clave en nuestro hogar, proporcionándonos calefacción y agua caliente. Pero, al igual que cualquier otro aparato, requiere un mantenimiento adecuado para asegurar su correcto funcionamiento y prolongar su vida útil. Las revisiones periódicas son esenciales para detectar posibles problemas y prevenir fallos o averías graves.
Además de garantizar la seguridad, las revisiones periódicas también contribuyen a mejorar la eficiencia energética de la caldera. Un equipo en buen estado y ajustado correctamente consume menos gas, lo que se traduce en un ahorro en nuestra factura energética. Por lo tanto, realizar revisiones periódicas no solo nos brindará tranquilidad, sino que también nos ayudará a reducir los gastos.
¿Con qué frecuencia debemos realizar la revisión de la caldera de gas?
Según la normativa vigente, las calderas de gas deben ser revisadas cada dos años por un profesional cualificado. Esta revisión obligatoria tiene como objetivo verificar el correcto funcionamiento de la caldera, asegurando que cumple con los estándares de seguridad y emisiones establecidas.
Además de la revisión bianual, los fabricantes suelen recomendar, e incluso pueden establecer en las condiciones de garantía, que las revisiones sean anuales. Esto garantiza un mantenimiento más frecuente de la caldera de gas, lo que contribuye significativamente a mantener su buen estado y funcionamiento óptimo. Los profesionales del sector, incluidos los servicios técnicos, también respaldamos esta recomendación de realizar una revisión anual.
Debido a esto, los contratos de mantenimiento, de los servicios técnicos, suelen incluir una revisión y limpieza anual como parte de sus servicios. Esta práctica asegura que la caldera se mantenga en condiciones óptimas de funcionamiento durante todo el año, minimizando el riesgo de averías y garantizando la seguridad y eficiencia del equipo a largo plazo.
Tabla de Operación de mantenimiento preventivo
Operaciones de mantenimiento |
Periodicidad | |
≤ 70kW | >70kW | |
1. Limpieza de los evaporadores | t | t |
2. Limpieza de los condensadores | t | t |
3. Drenaje, limpieza y tratamiento del circuito de torres de refrigeración | t | 2 t |
4. Comprobación de la estanquidad y niveles de refrigerante y aceite en equipos frigoríficos | t | m |
5. Comprobación y limpieza, si procede, de circuito de humos de calderas | t | 2 t |
6. Comprobación y limpieza, si procede, de conductos de humos y chimenea | t | 2 t |
7. Limpieza del quemador de la caldera | t | m |
8. Revisión del vaso de expansión | t | m |
9. Revisión de los sistemas de tratamiento de agua | t | m |
10. Comprobación de material refractario | . | 2 t |
11. Comprobación de estanquidad de cierre entre quemador y caldera | t | m |
12. Revisión general de calderas de gas | t | t |
13. Revisión general de calderas de gasóleo | t | t |
14. Comprobación de niveles de agua en circuitos | t | m |
15. Comprobación de estanquidad de circuitos de tuberías | . | t |
16. Comprobación de estanquidad de válvulas de interceptación | . | 2 t |
17. Comprobación de tarado de elementos de seguridad | . | m |
18. Revisión y limpieza de filtros de agua | . | 2 t |
19. Revisión y limpieza de filtros de aire | T | m |
20. Revisión de baterías de intercambio térmico | . | t |
21. Revisión de aparatos de humectación y enfriamiento evaporativo | T | m |
22. Revisión y limpieza de aparatos de recuperación de calor | T | 2 t |
23. Revisión de unidades terminales agua-aire | T | 2 t |
24. Revisión de unidades terminales de distribución de aire | T | 2 t |
25. Revisión y limpieza de unidades de impulsión y retorno de aire | T | t |
26. Revisión de equipos autónomos | T | 2 t |
27. Revisión de bombas y ventiladores | . | m |
28. Revisión del sistema de preparación de agua caliente sanitaria | T | m |
29. Revisión del estado del aislamiento térmico | T | t |
30. Revisión del sistema de control automático | T | 2 t |
31. Revisión de aparatos exclusivos para la producción de A. C. S. de potencia térmica nominal ≤ 24,4 kW | 4a | – |
32. Instalación de energía solar térmica | (*) | (*) |
33. Comprobación del estado de almacenamiento del biocombustible sólido | S | s |
34. Apertura y cierre del contenedor plegable en instalaciones de biocombustible sólido | 2t | 2t |
35. Limpieza y retirada de cenizas en instalaciones de biocombustible sólido | M | m |
36. Control visual de la caldera de biomasa | S | s |
37. Comprobación y limpieza, si procede, de circuito de humos de calderas y conductos de humos y chimeneas en calderas de biomasa. | T | m |
38. Revisión de los elementos de seguridad en instalaciones de biomasa | M | m |
¿Quién debe encargarse de realizar la revisión de la caldera de gas?
Aunque la revisión de la caldera de gas es obligatoria, es responsabilidad del usuario solicitarla. No debemos esperar a que la empresa contratada nos avise, sino que debemos ser proactivos y contactar a un profesional cualificado para programar la revisión.
Es importante tener en cuenta que la revisión de la caldera de gas debe ser realizada por un técnico especializado. Estos profesionales tienen los conocimientos y habilidades necesarios para llevar a cabo la revisión de manera segura y eficiente. Intentar realizar la revisión por nosotros mismos puede ser peligroso e incluso invalidar la garantía de la caldera.
¿Cómo encontrar un profesional cualificado para la revisión de la caldera de gas?
A la hora de buscar un profesional cualificado para que realice la revisión de la caldera de gas, es importante tener en cuenta varios aspectos:
- Podemos solicitar recomendaciones a familiares, amigos o vecinos que ya hayan realizado revisiones en sus calderas. Su experiencia y opiniones pueden ser de gran ayuda para encontrar un técnico de confianza.
- Verificar las credenciales y certificaciones del técnico o empresa que contrataremos. Asegurarse de que estén debidamente capacitados y acreditados nos brinda la tranquilidad de saber que realizarán un trabajo de calidad y confiable.
- Solicitar un presupuesto detallado antes de contratar cualquier servicio. De esta manera, podremos comparar precios y asegurarnos de obtener la mejor relación calidad-precio.
Beneficios de realizar revisiones periódicas
Realizar revisiones periódicas de la caldera de gas tiene numerosos beneficios. En primer lugar, garantiza nuestra seguridad y la de nuestra familia al detectar posibles problemas y prevenir accidentes como fugas, incendios o explosiones.
Además, las revisiones periódicas permiten mantener la eficiencia energética de la caldera. Un equipo en buen estado y correctamente ajustado consume menos gas, lo que se traduce en un ahorro en nuestra factura energética.
Asimismo, las revisiones periódicas prolongan la vida útil de la caldera. Detectar y solucionar problemas a tiempo evita que estos se conviertan en averías graves que puedan dañar el equipo irreparablemente.
Cuidados adicionales para mantener nuestra caldera en buen estado
Además de realizar las revisiones periódicas, existen otros cuidados que podemos llevar a cabo para mantener nuestra caldera de gas en buen estado.
- Mantener limpios los conductos de ventilación y la salida de humos de la caldera. La acumulación de suciedad o obstrucciones puede afectar el rendimiento del equipo e incluso ser peligrosa.
- Purgar los radiadores de forma regular. La acumulación de aire en el sistema de calefacción puede reducir su eficiencia y hacer que los radiadores no calienten de manera uniforme.
- Revisar periódicamente la presión del agua en la caldera. Una presión demasiado baja o demasiado alta puede afectar su funcionamiento.
La revisión periódica de la caldera de gas es fundamental para garantizar su buen funcionamiento, prolongar su vida útil y asegurar nuestra seguridad. Siguiendo las pautas establecidas por la normativa vigente, debemos realizar revisiones cada dos años, además de inspecciones más exhaustivas cada cinco años.
Es responsabilidad del usuario solicitar estas revisiones y contratar a un profesional cualificado para llevarlas a cabo. Así que no esperes más, programa la revisión de tu caldera y asegura el buen funcionamiento y la seguridad de tu hogar.